La feria del libro

Esta tarde he visitado la feria del libro de Madrid, en el Parque del Retiro. Más de 300 casetas con miles de volúmenes de todo tipo y condición que consiguen abrumar hasta el más letrado. A mí, en estas cosas, me pasa como en los grandes museos. Empiezo con muchas ganas en la caseta número 1, ojeando los libros, parándote en cada uno de los puestos... Y acabo pasando a toda prisa, aún siendo consciente de que puedo estar perdiéndome algo, hastiado de tanto de lo mismo y sin capacidad alguna para discriminar y clasificar lo que estoy viendo.

Por cierto que durante mi estancia en la feria he sido consciente de que leo menos de lo que me gustaría. La primera razón, para que engañarme, es que soy un poco vago y que la tele, aparte de gustarme mucho, me resulta más cómoda. La segunda razón por la que no leo lo suficiente es la falta de tiempo y el cansancio con el que llego por la noche a casa. Eso sí, el Metro, el autobús, en definitiva las largas distancias que hay que recorrer en Madrid, se están convirtendo en un poderoso aliado de la lectura, aunque de momento tiro de los periódicos gratuitos.

Pero la Feria del Libro de Madrid no sólo es un lugar en el que disfrutar de la literatura. Además es todo un paseo de la fama en el que ver caras conocidas. En la tarde de hoy hemos visto a Nuria Espert, Juan Cruz, Andreu Buenafuente, Octavio Aceves, Nativel Preciado, Mara Torres, Iker Jiménez y esposa (vaya cola que tenían estos para firmar libros), Alvaro Pombo, Antonio Gala, Julio Llamazares, Paul Preston, Silvia Tortosa, Belén Ordoñez o Fernando Sánchez Dragó, entre otros muchos. Vamos, que para haber llevado la cámara de fotos. Saludar a todos ya es más difícil, porque eso requiere comprarles sus libros y, otro de los motivos por los que no leo tanto, no son precisamente baratos.