El grupo Atresmedia comenzó la producción del programa En tierra hostil con la intención de
reforzar la programación de La Sexta. Pero, visto el resultado y, sin duda,
analizando cómo se mueve últimamente la audiencia, decidió estrenarlo en su
primer canal. Con una estrategia así de medida es de creer que su éxito no ha
sido una gran sorpresa.
El programa de Jalis de la Serna y Alejandra Andrade,
dos reporteros de calle curtidos en la redacción del ya histórico Callejeros, ha conseguido conectar con
lo que quiere la gente. Esto es, según las cifras, la realidad. Y lo que no se
puede negar es que la propuesta de En
tierra hostil está pegada a la realidad.
Una imagen del programa grabado en Ceuta sobre yihadismo |
Los reporteros, que son redactor,
cámara y productora y están todos debidamente reconocidos, intentan al menos
encontrarse cara a cara con lo que quieren contar. No es un programa basado en
cifras, estudios o entrevistas programadas. Al contrario, parece estar
creándose minuto a minuto y el espectador es invitado a ser un actor más de la
investigación sobre el terreno. De ahí que, quizá en uno de los aspectos más
discutibles de la fórmula, sigamos literalmente los pasos de los reporteros con
una cámara permanentemente encendida.
Las imágenes de seguimiento son fundamentales en este nuevo "reporterismo" |
Los reportajes de investigación o pegados a la actualidad ya
no son lo que eran. Hay una clara evolución respecto a las fórmulas más
clásicas, quizá representadas actualmente por el incombustible (por muchos
años) En portada de TVE. La pasada semana se emitía un interesante documento sobre la llamada “revolución de los
paraguas” de Hong Kong en el que, como siempre, las imágenes están medidas para
que aporten y los testimonios se preparan para que no falten puntos de vista.
Todo se crea para ponerse al servicio del discurso.
Nada que ver con los nuevos
reporteros televisivos, que utilizan todos los recursos posibles de la imagen y
el sonido para convertir la investigación en un entretenimiento televisivo, con
normas muy cercanas a la ficción. Lo vemos todo: la búsqueda, la producción, la
preparación de la entrevista…
La cámara es también protagonista en En tierra hostil |
El foco de los nuevos "reporterismos" se fija en los gestos, en los comentarios
fuera de cámara… Se busca reflejar o crear la tensión que, se supone, vive el
reportero. A falta de información real, los planos se completan con comentarios
sobre lo que éste ve, cree o siente… Y las imágenes, siempre, arropadas por una
banda sonora que, muchas veces, predispone al espectador sobre lo que va a ver.