Se ha acabado una nueva temporada de ‘Oregón Televisión’ que
ha supuesto la confirmación del gran éxito que ya fue el año anterior. Para conseguirlo
su equipo ha tenido que trabajárselo mucho. Porque no ha sido un éxito
repentino: llevaba varios años emitiéndose cuando empezó a destacar en los
datos de audiencia. De hecho, estuvo a punto de desaparecer y cuentan que sólo
una audaz e inteligente campaña de apoyo lanzada desde la productora que lo
creó lo consiguió salvar.
Pero poco a poco se ha asentado en la programación de
Aragón TV. Y no sólo por el acierto en su ubicación en la parrilla
sino, fundamentalmente, por su madurez. Los personajes que componen su universo
han encontrado una identidad muy definida. Tanto que han sido interiorizados
por los ciudadanos que ya los reconocen y los valoran. A ello se une una
estructura reconocible, de la que ya sabemos qué esperar en la forma aunque nos
sorprenda agradablemente en el fondo cada semana.
‘Oregón Televisión’ es hoy un
producto tan popular como imprescindible para una cadena como Aragón TV y para
un tejido audiovisual propio que necesita creaciones con semejante
originalidad, que destacan y crean imagen de marca.
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