martes, 15 de marzo de 2016

Los 700.000 euros de la Fórmula 1



TVE va de lío en lío. Ya no extraña a nadie que los jefes de prensa del Partido Popular hagan carrera en el ente, entrando directamente como directores de algo. Cuesta defender, con gestos así, la supuesta independencia de una casa en donde siempre hay alguna decisión en tela de juicio. 

Por ejemplo, después de liarla con el sueldo estratosférico que se llevaba Bertín Osborne por programa, y una vez que ha conseguido el éxito que puede justificar la inversión, acaban deshaciéndose de En tu casa o en la mía en medio de un debate en todos los medios. Encima aseguran que el desencuentro tiene un nombre: Pedro J. Ramírez. ¡Vaya historias!


¿Ha sido ésta la entrevista de la discordia?


Al parecer en la cadena pública tienen más problemas para renovar sus éxitos que para apostar por incertidumbres. Semejante comportamiento tiene poco de empresarial y mucho de sospechoso. Como si respondiera a intereses distintos al de la audiencia. 

Pocos han entendido la compra de una sola carrera de la próxima temporada de Fórmula 1. El Gran Premio de España se dará en abierto, lo demás se lo queda Movistar, que es quien recibe los 700.000 euros de TVE y otros 300.000 de TV3. Pero, ¿tiene sentido empresarial emitir una sola carrera del campeonato? Es cierto que con ese dinero también compran resúmenes de una hora para Teledeporte, ¿valdrían lo mismo sin la emisión de la prueba? 


Movistar hace de pago la Fórmula 1


Algunos nos preguntamos si el dinero de TVE es, en realidad, una subvención encubierta del Gobierno a través del ente público para una empresa que, quizá, pierda dinero con la apuesta. No queda nada para saber si la primera temporada completa de pago de la Fórmula 1 en España dará los réditos que se esperan. Eso sí, yo soy de los que pienso que la tele es un negocio y las carreras un buen producto con el que hacer dinero. 


jueves, 10 de marzo de 2016

Cuéntame, la gran serie española de referencia



La serie de TVE Cuéntame celebró la semana pasada sus 300 emisiones después de 17 temporadas. Comenzó contando la historia de la familia Alcántara en la sociedad de 1968 y ya anda por 1984. Ninguna otra serie propia del horario de máxima audiencia ha conseguido esta marca en España y, según cuentan sus creadores, sólo una veintena en todo el mundo. Y no sólo bate un récord. Pese a los cambios en el consumo televisivo, el cambio de relevancia de las distintas cadenas o el desgaste sufrido, Cuéntame sigue siendo una serie de éxito, siempre por encima de la media de audiencia de La 1. 


Qué mayores se están haciendo todos.


Aunque es verdad que sus datos están muy lejos de los que conseguía la serie en sus primeras temporadas, su evolución va pareja a la del mercado televisivo. Ha tenido malos momentos, sobre todo aquella temporada en la que todo pareció tambalearse tanto dentro de la familia Alcántara como en su emisión televisiva. La polémica infidelidad del padre de familia supuso, en cierta manera, un revulsivo para que la serie volviera a la primera plana. 


La mayor polémica de la serie llegó con el amor.


Y signo de que las cosas se hacen bien, es el aumento del número de telespectadores de Cuéntame según pasan las semanas. Las temporadas comienzan frías, pero el seguimiento crece semana a semana. Esto indica que las historias siguen enganchando. Que 18 años después, la vida creada de los Alcántara sigue siendo de interés.




Por cierto, merece la pena echar un vistazo a su colección de cabeceras, en las que han participado grandes artistas. 

Un estudio reciente define a la serie producida por Ganga como la más importante del audiovisual español. Seguramente lo es por todo lo conseguido, por lo narrado y el estilo didáctico con el que lo ha hecho y, sobre todo, por las adhesiones inquebrantables que aún despierta. Porque de lo que no cabe duda es que es una serie de esas que une a toda la familia, a las distintas generaciones. Y lo mejor, apostó por la calidad desde el principio, cuando el cartón piedra seguía dominando en la mayor parte de las producciones españolas.


Celebración del capítulo 300.


La décimo octava temporada será una realidad tras una renovación claramente merecida. No sé que sorpresas nos depararán los nuevos capítulos ni las temporadas que quedarán, pero seguro que el equipo de guionistas ya está empezando a pensar en el mejor de los finales. El que haga justicia a una serie casi perfecta.

jueves, 3 de marzo de 2016

Programas que han equivocado la cadena



El docu-reality A mi manera, en el que seis estrellas “clásicas” de la música española versionan los temas más conocidos de sus compañeros, languidece en la noche de los martes de La Sexta. Se estrenó bien, pero la audiencia ha ido abandonando la propuesta programa tras programa. Quizá porque después de la novedad, el formato se ha desgastado rápido por estar demasiado encorsetado, por ese freno que se imponen a sí mismos los protagonistas. O porque la fórmula de dedicar cada espacio a un único cantante ahuyenta a los que no son fans. Y, posiblemente, porque ya no son las estrellas que movían masas. 


El grupo de cantantes de A mi manera.


La cuestión es que A mi manera se encamina a ser un fracaso y yo me pregunto si hubiera “rascado” algún punto de audiencia más si se emitiera en otra cadena . Porque, con el perfil de los músicos que protagonizan el programa, ¿no quedaría mejor en La 1 la noche del jueves, justo después de Cuéntame

Hay programas que equivocan la cadena, bien porque no están dirigidos al público que suele verla o porque no responden al mismo estilo que los programas que la abanderan. Cuando veo A mi manera con el logotipo de La Sexta, no me pega. La cadena verde es de programas más intensos y dinámicos. Sólo hay que comparar la factura de Pesadilla en la cocina o Equipo de investigación con la de A mi manera, de estilo mucho más reposado y "elegante".


Dos de los protagonistas de Casados a primera vista.


Me pasa lo mismo cuando veo realitys en Antena 3. Creo que la cadena nunca ha sabido aprovechar este tipo de formatos, que quedan aislados en una programación que le da la espalda. No, Antena 3 no es Telecinco. Quizá por eso no ha tenido éxito el programa Top Chef, que no ha podido aprovecharse con solvencia de la moda de los programas de cocina. Ni siquiera entiendo la presencia actual de Casados a primera vista porque, aunque lidera los lunes por la noche con un dato escaso, está muy alejado del estilo de las series y programas que definen la cadena. 

Reconozco que tampoco hubiera programado El ministerio del Tiempo en La 1. Y aunque el fenómeno que ha provocado la calidad de la serie le ha dado una segunda vida, los discretos datos de audiencia convencional de la primera temporada me dan la razón. Los viajes en el tiempo no parecen ser argumento para enganchar al perfil medio de telespectadores de la cadena, claramente envejecido. Es cierto que los gestores de TVE quieren rejuvenecer su público, pero ese empeño debería ser más global, no sólo de un único producto. 


Una escena de El Ministerio del Tiempo.