Ha tenido que ser Internet y la sagacidad de algún visionario que sube sus conclusiones en elaborados montajes audiovisuales al 'Youtube' los que me expliquen mi irracional fijación con películas de monstruos y vísceras, zombis y vampiros...
Claro... ¡la culpa la tiene mi infancia!. Y más concretamente mi afición por Bola del Dragón (que yo siempre he llamado Bola de Drac)...
Este es el documento, rescatado de 'Entre machacas y becarios'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario