Siempre me ha dado miedo el Foro de Davos. Mucha gente rica y poderosa junta, quién sabe tramando qué, en un escenario propio de telenovela de intrigas. Y, casualidad o no, allá estuvo nuestro Presidente días antes de que se hiciera pública la honda preocupación del Gobierno por las pensiones del futuro.
El sistema, dijeron entonces, sólo es sostenible si, una vez más, echamos abajo algunos de los derechos adquiridos por los trabajadores tras siglos y siglos de explotación. Y así, sin preparación alguna y causando algún que otro amago de infarto entre los que ya se habían puesto fecha, se nos propuso aumentar la edad mínima de jubilación.
Una medida más en la línea de las que apuntan a sanear la empresa despidiendo a la mitad de los trabajadores o las que apuestan por la moderación salarial de los que, mira tu que casualidad, menos cobran. Ideas que resultan no sólo poco imaginativas sino poco afortunadas en uno de los países de la Europa de los Estados del Bienestar que más bajos tienen las pensiones y los sueldos.
¿No será que lo que falla es el sistema?. ¿A nadie se la han ocurrido fórmulas para abaratar el mantenimiento de una empresa sin necesidad de recortar ni sueldos ni plantillas de trabajadores?. ¿Y si empezamos por reducir papeleos e impuestos?. O, mejor, ¿qué tal si analizamos y revertimos derroches e injusticias históricas al más puro estilo de José Blanco con los controladores aéreos?.
1 comentario:
Siempre he pensado que la Seguridad Social española es una estafa piramidal en toda regla. Algo así como Afinsa o el Forum filatélico pero a lo bestia.
Te hacen cotizar por una cosa (pensión) que no saben si podrán darte. A eso en mi pueblo lo llamamos estafa.
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