Sálvame y el ultimatum de Competencia

Dice la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia que los contenidos del programa Sálvame de Tele 5 no se adecúan a la franja de protección infantil en la que se emite. Y, además, advierte de que es posible que se esté haciendo publicidad encubierta en alguna de las secciones. Así que el buque insignia de Tele 5, que cada día atrae a millones de espectadores durante horas, está seriamente amenazado de ser sancionado con multas millonarias si no empieza a cambiar. Pero claro, el cambio puede amenazar a la fórmula del éxito. ¿Cómo se transforma un programa que se basa en la forma de ser de sus colaboradores? ¿Qué se toca en esta tertulia alocada en la que se potencia la naturalidad sobre todas las cosas? 

Cuidado con lo que se dice a partir de ahora

De entrada, quizá crecido por el efecto que consiguió sobre Pedro Sánchez, Jorge Javier Vázquez se saltó su día libre para encabezar una protesta en directo ante “la amenaza seria a nuestra continuidad” que supone la advertencia de Competencia. Miedo deberían tener los responsables de la Comisión a los entregados contertulios de Sálvame. Como se lo propongan les sacan todos sus trapos sucios, sean o no verdad.

La fórmula "naranja" o "limón", que se ha puesto en marcha esta misma semana para intentar "diferenciar" de alguna forma los contenidos durante las intensas cuatro horas de programa, no parece ser una solución real. Se basa, única y exclusivamente, en la coacción a los tertulianos para que estén más tranquilos, así como en cambiar términos en los rótulos y contenidos en los reportajes. Pero, insisto, ¿cómo se pone coto a los desmanes propios de discusiones como las que dan forma a un programa como este?

Logotipo y lema para la protesta

Y luego está el siguiente debate: ¿es la tele la que se debe regular por espacios o las familias las que deben procurar que sus niños no vean lo que no deben? Si yo tengo un problema de obesidad, ¿es mi problema o el de la pastelería que tengo de camino a casa?

Gran Hermano: el 15 sigue con éxito

Termina una nueva temporada de Gran Hermano, uno de los programas más veteranos de la televisión. Posiblemente esta decimoquinta edición sea recordada como una de las más anodinas de toda la historia. Por eso, muchos de los que seguimos con orgullo el ‘reality’ de convivencia por antonomasia esperamos que la ganadora sea Paula, una joven tan divertida como inmadura que se ha convertido en la mayor animadora de esa casa. 

Paula en uno de sus "momentos"

Todos los grandes conflictos, al menos los más grandes, han pivotado alrededor de ella. Así que algunos de los muchos que hablamos de este programa pensamos que ese protagonismo necesario entre un casting fallido debería ser recompensado. 

Más allá del ganador, lo más curioso de esta etapa del popular concurso ha sido su inapelable éxito de audiencia pese al poco atractivo desplegado. Quizá ha bajado tres puntos respecto a la última edición, pero también ha cambiado la forma de ver televisión y ahora es muy difícil mantenerse por encima de un 20% de cuota de pantalla durante tres meses. 

El logotipo de la edición 15 de Gran Hermano

Y además ha tenido la fuerza suficiente como para aguantar en prime time un debate. Tan fuerte como siempre. Ya preparan el GH VIP.

Las casas de empeños ya tienen versión española

Los reyes del empeño llevan a La Sexta uno de los formatos más seguidos en EE.UU. Un ejecutivo encontró en la actividad diaria de una casa de empeños de Las Vegas la idea para un programa de televisión. Se dirigía, en principio, a evaluar el valor de objetos antiguos y con historia que llegaban a aquella tienda. Por eso Pawn Stars se emite en History Channel, donde comenzó en 2009 y todavía continua tras 218 episodios. La idea inicial se mezcló pronto con los conflictos de propietarios y clientes: dejó de estar únicamente centrado en los objetos y se acercó a la tele realidad. 

Los protagonistas de Pawn Stars

En EE.UU también se funciona por modas o impactos, así que el éxito de los empeños tuvo enseguida adaptaciones en otros canales. La televisión especializada en realitys TruTV estrenó un año después American Jewelry, donde los conflictos entre los miembros de la familia que regenta una casa de empeños en Detroit o entre ellos con sus enfadados clientes son el asunto principal. Ambos docushows encontraron hueco en la televisión española con el desarrollo de la TDT y han gozado del favor de parte del público fragmentado. Tanto que ahora tienen versión española en prime time.

Protagonistas de American Jewelry

'Lo imposible' o la importancia de retroalimentarse

Mediaset y Telecinco lo dan todo por el evento Lo imposible

No cabe duda de que si la cuota de pantalla del cine español está aumentando en los últimos años es gracias a su vinculación a la televisión. La norma que obliga a los operadores a invertir en el cine un porcentaje de sus beneficios, muy criticada por estas empresas en su momento, está empezando a mostrarse como un acierto. 

La unión de la visión de negocio de las televisiones con la creatividad de los guionistas y directores de cine en filiales dedicadas a la producción y promoción cinematográfica ha conseguido récords de recaudación como los de 8 apellidos vascos, Tadeo Jones o Lo imposible. Para redondear el éxito que tuvo esta última película en las salas, llega ahora el momento de dar el pelotazo televisivo. 

La escena más impresionante de la exitosa película.

Y tal como ocurrió cuando se estrenó en cines, todas las plataformas de Mediaset se han volcado con la promoción del estreno en televisión. La gran idea de emitirla con unos minutos extras que ni siquiera están en el DVD, la creación de documentales sobre el hecho en el que se basa o las entrevistas exclusivas con sus protagonistas reales, han configurado un evento con el que Mediaset ha querido seguir explotando el fenómeno Lo imposible. Y la jugada le ha salido redonda con una audiencia espectacular.

La retroalimentación como fórmula para aumentar la audiencia

Mercedes Milá anunciaba en Gran Hermano la emisión de unas imágenes exclusivas de los minutos extras de Lo imposible, en primicia en Tele 5. Durante el intermedio se promocionó la entrevista de Risto Mejide a la verdadera protagonista de la historia. La promoción se multiplica por todos los canales del grupo que, por cierto, emitían la noche del jueves anterior un preestreno de forma simultánea. La cuestión es retroalimentar el evento. 

Una imagen del documental sobre el caso real que inspiró la película.

Se ha hablado de la película en los informativos y en el buque insignia del canal, Sálvame. De hecho, este programa ha aplicado con mayor intensidad que ningún otro la fórmula de la retroalimentación para dotarse de contenidos y aumentar su audiencia. Tanto que, por momentos, parece que no necesite de ninguna otra persona o programa ajeno para llevarse a cabo. De este han salido otros, como El Cazamariposas, que empezó en otro canal y ahora se interrelaciona con su matriz como uno solo. Las investigaciones de Ana Rosa aparecen en los informativos y los presentadores más carismáticos hacen ‘cameos’ en las series. La cuestión es actuar como un grupo unido y recordar continuamente al telespectador todas las opciones que tienen.

El intermedio es ya un referente en la historia de la televisión

Coincidiendo con la detención de Francisco Granados y los demás integrantes de la trama que ha desatado la operación Púnica, el programa El intermedio en La Sexta consiguió su récord histórico de audiencia. Algo más de un 16% de cuota de pantalla situó al programa presentado por el Gran Wyoming entre lo más visto de la jornada. 

Tras ocho años en la pantalla manteniendo tanto su estilo como sus caras más visibles, parece que la situación social y política ha conseguido consolidar definitivamente al programa. Desde que comenzó, casi al mismo tiempo que la cadena de la que se ha convertido en buque insignia, El intermedio ha ido arañando de forma lenta pero progresiva décimas en la carrera de las audiencias. 

El Gran Wyoming, presentador de El Intermedio.

Para los ejecutivos de La Sexta fue, en su momento, una apuesta de futuro. Se dio confianza a un producto que necesitaba madurar y encontrar a su público. Ahora, en una situación complicada en lo social, es ya la referencia de la denuncia política mezclada con sano humor. Y su presentador, el Gran Wyoming, es ya un símbolo construido a base de coherencia a lo largo de toda su carrera.

Yo tuve el placer de estar durante un tiempo en el equipo del programa El intermedio. Fue en su primera etapa, cuando tanto la cadena como el espacio eran una de las últimas opciones en las listas de audiencia. Eso sí, ya por entonces el noticiero satírico que comenzaba con las frases “Ya han visto las noticias. Ahora les contaremos la verdad” era de lo más destacado en la programación de La Sexta. 

Desde entonces ha profundizado en los contenidos, completando el repaso a las noticias de la actualidad desde la crítica humorística con entrevistas y reportajes de crítica social. Detrás de lo que dice Wyoming, de los comentarios de Dani Mateo o de las preguntas de Thais Villas, hay un equipo ya veterano de guionistas, capitaneado por Miguel Sánchez Romero, todo un experto en la reflexión con chiste. Consiguen dar contenido atractivo a la personalidad de un presentador con estilo propio y a otros presentadores que ejercen distintos roles. Es de justicia reconocer la labor de los guionistas, que se adaptan a la forma de expresarse de Gran Wyoming para que parezca que todo se le ocurre a él solito.

Los presentadores de El Intermedio.

Desnudarse en la tele ya no es un tabú

El nuevo programa de citas (los llamados dating show) de Cuatro ha dado mucho que hablar. Adán y Eva es un programa sencillo, variación simple de otros espacios para enamorarse que ha emitido la misma cadena como Quien quiere casarse con mi hijo o Un príncipe para Corina. Pero claro, en un país que aún se muestra públicamente reprimido en cuanto a la sexualidad, mostrar gente desnuda en prime time sigue resultando llamativo. Al menos para comentarlo porque, aunque consiguió un muy buen dato en relación a la media de la cadena (14%), tampoco fue un éxito rotundo de audiencia. 

El triunfador claro de la noche de los martes es el que se espera: la serie Velvet. Porque el gancho de ver gente desnuda en la tele no es suficiente para convertirse en un gran éxito de espectadores en televisión, aunque sí para capitalizar las conversaciones en las redes sociales. Lo que indica, de entrada, que muchos jóvenes se vieron seducidos por la oferta. Eso sí, tampoco la desnudez fue el objeto principal de los debates. Los comentarios se centran más bien en el nivel intelectual de los concursantes. 

Una imagen del programa Adán y Eva

Y es que lo de ver desnudos en televisión es cada vez más normal. Incluso en los productos que nos llegan del otro lado del charco. Y eso que hace unos años era prácticamente imposible ver un desnudo integral en una serie de televisión de Estados Unidos. La sociedad del país norteamericano no considera permisible la emisión de cierto tipo de escenas en las televisiones generalistas. Pero esto ha cambiado desde que los canales de cable están apostando por la ficción y, al mismo tiempo, recibiendo el favor de los ciudadanos. 

El ser de pago y ocupar nichos especializados ha animado a estas empresas a arriesgar en sus contenidos. Y eso incluye también el no impedir los desnudos si así lo requiere el guión. De esta forma, cada vez hay más series que muestran a sus protagonistas como llegaron al mundo. La serie más comentada en este sentido es Juego de tronos. En ese aspecto, y para dar más realismo al mundo inventado por George R. Martin, no se ha escatimado en desnudos en escenas tanto sensuales como dramáticas. 

Esta explícita imagen se ha visto en Juego de Tronos.

Pero hay más series que se arriesgan, y de todos los estilos. En Dexter, True Blood, Girls, Sons of Anarchy o American Horror Story, por ejemplo, hemos visto a sus protagonistas con poca o ninguna ropa. Y, de hecho, esa permisividad está empezando a verse también en series de canales generalistas.

Salvados está haciendo historia

Jordi Évole ha vuelto con nuevas entregas de Salvados. Lo hizo con una propuesta poderosa, que ha llamado mucho la atención. Reunir al líder de Esquerra Republicana de Catalunya con una de esas familias sevillanas que, según el propio discurso de los nacionalistas, roba a los catalanes fue magistral. Una idea tan sencilla en su ejecución como valiente en su concepción. 

Un momento del programa de Oriol Junqueras con una familia sevillana.

Évole necesita que sus actores principales se presten y es merecido reconocer el arrojo de Oriol Junqueras por someterse a la prueba. Pero es que el periodista ha demostrado con el tiempo que es muy capaz de gestionar situaciones como esta sin provocar víctimas. Las cámaras de Salvados no hacen más que enfrentar la realidad. Ofrece a todos los protagonistas la posibilidad de expresarse desde todos los puntos de vista del asunto analizado. Así que depende del propio entrevistado el convencer o no a una audiencia que se ve representada por el periodista curioso, ese que siempre se atreve a hacer la pregunta que todos nos hemos hecho alguna vez. Son precisamente los que se niegan a hablar, los que rehuyen la posibilidad de explicarse como Juan Cotino, los que salen peor parados en Salvados. 

Cotino la lió con su aparición en Salvados.

El programa consigue encandilar tan sólo con el estilo y los contenidos ideados por Jordi Évole y su equipo de creadores. Ni gran espectáculo, ni espectaculares giros, ni ritmo endiablado… Sólo conversación, proximidad… incluso silencios. Ante el conjunto de la oferta que nos ofrecen las cadenas españolas, estar por encima del 20% de cuota de pantalla en la difícil noche del domingo con estas características supone todo un hito. Sin duda Salvados está haciendo historia en La Sexta.

Comienza la nueva temporada en EE.UU.

La temporada estadounidense se muestra y el resto del mundo espera

La semana que acaba de pasar es la que la mayoría de las grandes televisiones de Estados Unidos (las llamadas ‘networks’) escogen para comenzar a estrenar sus nuevas apuestas de temporada. Allí son muy ordenados en esto de hacer televisión y, como ya comenté una vez en este mismo espacio, no sólo saben con mucho tiempo cuando va a empezar a emitirse un programa o una serie, sino que tienen establecida claramente la programación del canal. Y no sólo me refiero a los contenidos, también la propia estructura, de la que depende mucho la duración de los productos y su propia estructura. 

Ahora, las televisiones de todo el mundo esperan a ver cómo les va a las estadounidenses en sus apuestas. Del éxito de esos programas y series despenderán las programaciones de las cadenas de todo el mundo, más o menos expuestas a lo que se marca desde la industria televisiva más poderosa del mundo. De hecho, algunas emisoras deciden incluso comprar ciertos productos antes de que se estrenen, tan sólo por lo que parecen y dispuestos a no dejarse quitar por la competencia un presunto éxito. Así que los estrenos estadounidenses son, en realidad, estrenos del mundo entero.

Esta temporada dos series han concentrado la mayor parte de los comentarios. Por un lado está How to get away with murder, un drama legal creado por la nueva reina de la televisión Shonda Rimes, creadora de Anatomia de Grey y Scandal. Y, además, se habla mucho de Gotham, una serie que pretende dar a entender las razones del deterioro de la ciudad en la que un día aparecerá Batman.

La nueva serie Gotham es una de las que más expectación han causado

Internet y las redes sociales son claves a la hora de señalar el éxito

En realidad la televisión norteamericana siempre ha estado globalizada. A los canales del mundo llegaron ya en tiempos del blanco y negro la serie de misterios de Hitchcock, la de la bruja ama de casa o la de Mr. Ed, el caballo que hablaba. Luego Bonanza o Ironside. El éxito en EE.UU.  garantizaba la distribución internacional. Pero las emisiones de allí han alcanzado la mayor difusión mundial posible, incluso por encima de la acogida de la audiencia en la televisión convencional, con el desarrollo de Internet.  

Y es que el visionado a través de la red de redes ha crecido tanto en los últimos años que ya cuenta, incluso, a la hora de evaluar el éxito de una propuesta. Es por eso que una serie debe lanzar una buena estrategia de difusión a través de las redes sociales. Se ha demostrado que las cadenas toman decisiones sobre sus productos por las descargas que se producen, tanto en las páginas oficiales como en las piratas. O que valoran excepcionalmente el hecho de que una serie origine numerosos comentarios en Twitter. De hecho, un estudio de la propia plataforma asegura que una mayor actividad supone inmediatamente el aumento de espectadores en la televisión convencional.

La popularidad de Breaking Bad creció en las redes sociales

Gran Hermano y los que saben mucho de tele

Gran Hermano y la capacidad de sorpresa para vencer en su año 15

La semana pasada me preguntaba en esta misma sección por cuál sería el resultado de uno de los grandes duelos de programación de este otoño, el que iba a enfrentar a Águila Roja, Tu cara me suena mini y el recién desembarcado Gran Hermano 15.  El reality incombustible llegaba a la parrilla con la desventaja de hacerlo tarde. Sus dos competidores ya se habían estrenado el jueves anterior, repartiéndose casi a partes iguales la mayor parte de la tarta de la audiencia. En la presentación de Gran Hermano su presentadora, Mercedes Milá, decía estar asustada por la competencia. No iba a ser fácil destacar entre dos programas que habían conseguido sendos 20% de share en su primera emisión. Pero los experimentados creadores del programa de convivencia supieron de nuevo dar con la tecla para ganar. Nuevas reglas, otra forma de participar que incluye una cabra entre los concursantes y, de guinda, la propia Milá durmiendo en la casa. Apuestas tan arriesgadas como necesarias para un programa que, pese a todas las polémicas o precisamente por ellas, sigue siendo un referente y ya forma parte de la historia de la televisión de este país.

El logotipo de la nueva edición de GH

Visionarios que saben leer como nadie las expectativas de la audiencia

El primer programa triunfador de la temporada fue Pequeños gigantes, el nuevo talent de niños en Tele 5 que había conseguido un impresionante dato del 25% de la audiencia total en su estreno. Así que, dado el éxito, me extrañó mucho que la cadena anunciara un cambio de día de emisión en su segunda entrega, contradiciendo la ley del “No lo toques si funciona”. La serie española Hermanos ocuparía la noche de los martes y el concurso se trasladaba a la noche del miércoles. El rumor era que los programadores de Tele 5 temían el arrastre de audiencia que podía tener Broadchurch, una serie británica que Antena 3 acababa de programar para ese miércoles noche. Por eso decidieron enfrentarla con el que había sido su gran éxito. Pero, ¿Broadchurch? ¿Miedo por una serie de nombre extraño que la mayoría de la población española no conocía? ¿Podría ser rival contra, por ejemplo, la propia Hermanos? Pues sí. Lo fue. Ni Pequeños gigantes ni nada, Broadchurch se alzó con el triunfo la noche del miércoles. Y yo admiré inmediatamente a los programadores visionarios que controlan perfectamente los gustos de la audiencia española.

La primera emisión de Broadchurch se convirtió en un éxito que algunos esperaban

Los niños se perfilan ahora como la nueva moda de la tele

En cuanto a audiencias han sido los grandes damnificados de la semana, porque Pequeños gigantes y Tu cara me suena mini perdieron seguimiento frente a otras ofertas, pero los progrmas con niños protagonistas destacan en presencia. Programas de gran éxito como La Voz o MasterChef, han triunfado más si cabe con su versión niños. Así que la consigna en televisión es ahora crear versiones para niños de todo. Hasta el Por la cara de Aragón TV se suma a la moda a partir de este mismo fin de semana después de un casting por toda la comunidad.

Las series animadas. El éxito de 'Los Simpson'

Veinticinco años de éxitos de ‘Los Simpson’, una serie muy repetida

Cuando en el anterior artículo me preguntaba “¿Cuál es la mejor serie de la historia?”, algunos amigos y seguidores me apuntaron inmediatamente a la comedia animada ‘Los Simpson’. Alguno me comentaba que, si no es la mejor, lo que si es cierto es que pocas producciones televisivas aguantan mejor el tiempo. Me aseguraban que muchos siguen viendo y disfrutando de los primeros episodios de la familia amarilla como si fuera la primera vez. Porque con la política de programación de Antena 3, donde la serie tiene un espacio propio del que no se ha movido en la última década, los episodios se han reemitido sin parar, manteniendo una audiencia destacada. Tanto que la cadena no se plantea a corto plazo cambiar la estrategia de mantener ‘Los Simpson’ en doble ración diaria justo antes de su primera edición del informativo. Si tras sus veinticinco temporadas la serie animada cuenta con 549 episodios, el año tiene 365 días y Antena 3 los emite de dos en dos cada jornada, hagan cuentas. ¿Cómo no se van a repetir? Y esto ahora. Imagínense hace diez años, cuando tenía 220 capítulos menos y la cadena española ya los emitía a ese ritmo.

Los personajes de Los Simpson

Las ventajas de las series animadas que les permiten aguantar en el tiempo

Un éxito como el de ‘Los Simpsons’ es amortizable como ninguno. La animación permite mantener una producción sin grandes cambios y con menos costes que una serie de personajes de carne y hueso. Que se lo digan, si no, a los productores ‘The Big Bang Theory’, que para seguir con la serie en las próximas temporadas han tenido que atender a las peticiones de sus protagonistas. Nada más y nada menos que un millón de dólares por episodio van a cobrar algunos. Homer Simpson no pide aumento de salario. En todo caso lo hará su creador, pero sólo es uno. Y los dobladores no sólo no tienen el mismo caché que los actores sino que, además, son más prescincibles. A esto hay que sumar que los protagonistas de las series animadas no crecen, no tienen crisis existenciales, no se embarazan… Y no hay que preocuparse por cambiar el guión o buscar nuevas tramas que enlacen con las exigencias del paso del tiempo. Así, Bart Simpson sigue siendo el mismo que cuando empezó la serie y el público no espera de él mucho más, porque no se piensa en él con las contradicciones de una persona real.

Los ahora millonarios protagonistas de 'The Big Bang Theory´ "simposonizados"

Los dibujos animados encuentran su acomodo entre los adultos

La aparición de ‘Los Simpson’ hizo que viéramos de otra manera los dibujos animados. Nos dimos cuenta que era un género compatible con la edad adulta. El canal americano que estrenó la serie, FOX, se ha convertido en la cadena de la animación para adultos y tiene una noche entera dedicada a ella. A los episodios de ‘Los Simpson’ se suman los de ‘Futurama’, ‘American Dad’, ‘Padre de Familia’ y ‘El show de Cleveland’. Títulos ya míticos y conocidos entre los adultos, a cada cuál más irreverentes, que en España emite en abierto el canal Neox.

Los protagonistas de la serie 'Padre de Familia'

Los Emmys coronan a 'Breaking Bad'. ¿La mejor serie de la historia?

El éxito de los Emmy significa el éxito de la televisión en Estados Unidos

Este pasado lunes se entregaron los Emmys, los premios de la televisión estadounidense. Si durante mucho tiempo pasaron casi inadvertidos, como un asunto propio de aquel país e incluso no demasiado relevantes allí, ahora se han convertido en una cita de repercusión internacional. Con una audiencia millonaria que se traduce en una cada vez más trabajada gala espectáculo, la relevancia señala la buena época de la televisión en Estados Unidos. Incluso los actores más laureados del cine deciden contar con su propio ‘show’, el nombre con el que se definen las series en Estados Unidos. De hecho, el ganador del Oscar al mejor actor de este año, Matthew McConauguey, estaba también nominado en la misma categoría en los Emmy por la serie policiaca ‘True detective’. El ‘star system’ ya no se distingue por el medio en el que trabaja. Los mejores no parecen pensar en la televisión como un medio menor. Y esto es porque se hacen muy buenos productos, que alcanzan una gran repercusión internacional con muy buenas críticas. De entre lo que se produce, se destaca la originalidad y una valentía que es difícil encontrar o desarrollar en los más destacados productos cinematográficos.

Cartel promocional de los Emmys

‘Breaking bad’ se consagra como una de las mejores series de la historia

¿Cuál es la mejor serie de la historia? Durante mucho tiempo se ha apuntado a las series que provocaron el renacimiento de este género televisivo, allá por el 2004. Especialmente a ‘Perdidos’, que alcanzó una inusitada fama internacional con una propuesta diferente, alejada de los modelos tradicionales. La propuesta experimental dio gran importancia a la continuidad y a la creación de un universo propio. Enganchó a millones de personas en todo el mundo a través de un nuevo medio: Internet. Pero ‘Perdidos’ no supo acabar Ahora las redes sociales destacan que ‘Breaking Bad’, la serie que ha ganado este año los más relevantes Emmys dramáticos, ha conseguido ser perfecta en su conjunto. Que ha conseguido cerrar con maestría el aprovechamiento de los elementos serializados, el manejo del universo creado durante cinco temporadas y 62 capítulos. Con unos personajes dibujados y desarrollados con gran oficio, beneficiados por grandes interpretaciones, el guión ha fluido y enganchado poco a poco a millones de personas. Hoy muchos la sitúan ya como la mejor serie de la historia y los Emmys se han sumado al reconocimiento.

El grupo de actores de Breaking Bad celebrando los premios

Sofía Vergara como paradigma de la relevancia latina

‘Modern Family’ se impuso por quinto año consecutivo como mejor serie de comedia. Todo un récord, alcanzando a la mítica ‘Frasier’. Entre los secretos del éxito está Sofía Vergara, actriz de ascendencia colombiana que interpreta con acierto a una inmigrante latina. Es una de las actrices mejor pagadas de la televisión americana, donde cada vez es mayor la influencia de la comunidad latina. Algunos productos televisivos en español, fundamentalmente a traves de Tele Mundo o Univisión, superan la audiencia de las 

grandes ‘networks’. El último gran éxito ha sido la adaptación latina de ‘Ana y los siete’.

Sofia Vergara posando en la alfombra roja de los Emmys

Lo que nos cuentan y cómo nos lo cuentan

La confesión de la reportera Desiree de ‘Espejo Público’. Llegar demasiado lejos para tener una buena imagen

Los espectadores pudimos ver hace unos días, en riguroso directo, como una reportera del programa ‘Espejo Público’ sufría la agresión de un grupo de personas en el Peñón de Gibraltar. En un primer análisis me asaltó la indignación y me sumé a la condena de sus enfadados compañeros. Porque no se puede entender que una periodista tenga que sortear basura y piedras por no decir algo del gusto de los agresores. 

El momento de la conexión. Fuente: lavozlibre.com

Un rato después, en las redes sociales se aseguraba que la escena que nos había indignado no era real. Se decía que el equipo de la televisión se estaba inventando la agresión. Así que la reportera tuvo que volver a la pantalla para negar la mayor. Seria y afectada, aseguró que “jamás hemos preparado un escenario para una noticia”. 

Pero cuando parecía que nos quedábamos tranquilos, a la mujer le dio un ataque de sinceridad y confesó que, ella no, pero que sí había visto a compañeros preparar escenas. Nada menos que echando cajetillas de tabaco al mar para componer la mejor de las imágenes sobre el contrabando. Sin duda es llegar demasiado lejos y nos crea dudas razonables sobre todo lo que vemos.

Los informativos convertidos en contenedores de imágenes sorprendentes. La noticia es más noticia si se ha grabado sin calidad

Hay que ver cómo cambian también los informativos con el tiempo. En nada se parecen ya a lo que se llevaba hace tiempo. Los presentadores ya no se muestran serios y rígidos, sino más bien cercanos y muy comunicativos. Si hace falta andar, se anda. Si hay que reírse con el compañero, se ríe. Los decorados se rinden al espectáculo. 

Informativos Telecinco con la Copa del Rey en el plató. Fuente: Fórmula TV

Si antes no debían despistar al espectador de lo verdaderamente importante, ahora algunas cadenas creen que deben completar el interés informativo. Y si no es por el decorado, se destaca por el contenido. El secreto está en buscar la imagen más impresionante, casi convirtiéndose en un programa al estilo del veterano ‘Impacto TV’. 

Una imagen de cámara de seguridad que salió en todos los informativos

Las imágenes de los chinos son un filón, pero lo que siempre produce noticias llamativas son las cámaras de seguridad. No importa la calidad, lo importante es lo que se deduce. Robos, atracos, accidentes… La mejor imagen de impacto es la que tiene mala calidad. Entonces se le presupone autenticidad. Y más si los autores de las imágenes son testigos que registran sus reacciones con móviles o videocámaras. ¡Eso sí que se vende!