Si una mujer toca los cojones (no en el sentido literal sino en el más 'moscacojonero' posible) a un tío, casi con seguridad recibirá el apelativo de 'mal follada'. Es algo habitual entre los hombres. Yo mismo reconozco haberlo dicho alguna vez, en plan frase hecha. Claro que, en mi caso, teniendo muy claro que no había nada de racional en mi comentario.
Claro que, si se lo digo yo a un amigo o a un compañero de trabajo y nos reímos en comandita, no deja de ser más que una broma burda y poco correcta. En cambio si lo dice un señor con una responsabilidad política y en un medio público como es su 'facebook' oficial, pues ya tiene otra connotación.
Nada, que es lo que contaba yo hace unos post con la peineta de Aznar, que hay que saber qué es lo que exige un puesto. Y por supuesto, obrar con sensibilidad y especial respeto a lo que supone ser un cargo público. Y en esta realidad no se pueden hacer distingos ideológicos.
Y por eso me parece bien que al señor que, sin el más mínimo de esa sensibilidad que se exige a nuestros representantes, llamó a una periodista catalana 'mal follada' por haber ejercido su papel de periodista ante su jefe de partido, el presidente socialista de la Generalitat, haya sido desposeído de, al menos, parte de su poder.
A ver si aquí, también a nuestros políticos parlanchines, se empieza a exigir y a castigar por sus actos. Alguna andanada vocal de todo un señor portavoz en el Parlamento Europeo del que ni me apetece decir su nombre merecería un correctivo por decir un despropósito imperdonable sin prueba alguna.
Y a ver, por otro lado, si ciertos políticos comienzan a acostumbrarse a encontrarse periodistas de verdad, que pueden ser duros sin necesidad alguna de ser sectarios. Que ejercen sus complejos y de forma activa su labor de preguntar y exigir respuestas. Que se revela ante los giros dialécticos sin sentido a los que algunos se han acostumbrado a echar mano cuando no tienen qué contestar.
Y eso que a Montilla no le preguntaron por la Corona Catalano-Aragonesa. Me hubiera gustado ver como salía de ese jardín.
Oye... que guay... Me acabo de hacer un artículo para el lunes.
Por cierto que una entrevista de Montilla siempre puede verse desde el humor, tal y como lo hacen en un programa muy bueno de la misma TV3.
2 comentarios:
Alberto,
1-Impresentables los hay en todos los lados, y en el gremio del taxi aún prevalecen los modos cuarteleros. El político cesado por acusar de malfollada a la Terribas es el presidente del Instituto Municipal del Taxi de Barcelona.
2-Lo principal que Montilla debe tener muy presente son los 600 000 parados con vecindad catalana. Y ZP debe tener también muy presente los 4.500.000 parados con vecindad española.
Lo demás, son fuegos de artificio, incluido los numeritos de la directora de TV3, cuyas entrevistas mas que incisivas son estresantes porque no se puede digerir ninguna pregunta/respuesta correctamente.
Yo no sé si esa señora follará bien o mal. Lo que es Montilla...... lo tengo claro!!
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