Hice una visita al Caixa Forum de Madrid, este pasado lunes, y descubrí un trabajo audiovisual impactante. Formaba parte de 'Cartografías Contemporáneas', una exposición que pretende reflexionar sobre los espacios y que, lo reconozco, a mi no me gustó especialmente. Pero este trabajo en concreto, el vídeo del artista alemán Till Roeskens me atrajo tanto que consiguió que me quedará viéndolo durante unos 40 minutos, sentado en un taburete en medio del pasillo con los cascos puestos. Se titula 'Videomappings: Aída, Palestina'.
Lo primero que me llamó la atención fue el tema. Y es que el conflicto palestino-israelí es uno de esos temas que mueven conciencias, al menos a mi. Roeskens propone a los ocupantes del campo de refugiados de Aída que nos cuenten sus experiencias vitales a través de los cambios en el territorio que les rodea, mientras dibujan ese entorno y lo transforman al ritmo del relato.Y lo que cuentan estos palestinos resulta estremecedor.
Una imagen del audiovisual 'Videomappings: Aída, Palestina'
Tan estremecedor que no puedo reprimir mi profunda indignación por el olvido de un pueblo que sufre a unas élites incapaces y a un opresor externo que se aprovecha hasta el límite más insospechado en su propio interés. Y quiero gritar de nuevo que nunca ha sido y no es una guerra justa, sino una invasión y opresión que recibe respuesta. Respuesta palestina violenta que siempre es de grado muy inferior a la que ejerce diariamente el ejército israelí.
Es una situación que requiere de respuestas firmes que la comunidad internacional, "chuleada" también constantemente por la soberbia israelí, es incapaz de dar. Al menos trabajos como éste ayudan a dar a conocer las injusticias a las que son sometidos los palestinos. Injusticias que impresionan, en serio.
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